El artículo apareció primero en el número 41 de /Autonomía, en la Jornada Aguascalientes.
El ejemplar pasado de /AUTONOMÍA tuvo por portada un
artículo que sobre las campañas electorales preguntaba “¿eso es lo mejor que
tienen?” pregunta por demás necesaria, y es que, al menos en lo personal me
resulta ofensivo el nivel de discusión en las “opciones” políticas.
Esa pregunta me llevo a otras ¿esos son los mejores
políticos que tenemos? ¿Somos un país que merecemos que ese tipo de personas
tomen decisiones que afectaran a todos? En su momento me grite un retundo no,
en mi mente claro. Pero después lo pensé
en términos de lo colectivo, en lo que hace la mayoría la población y la
respuesta cambió a un sí. Somos un país
apático que dejamos en que tomen las decisiones importantes, personas que
sabemos no están capacitadas para hacerlo, o que tienen otros intereses
contrarios a los colectivos; por eso sí, merecemos este gobierno y peor aún,
merecemos el que sigue.
Volviendo a eso de las campañas, y a lo económico; los
candidatos manejan a diestra y siniestra, la idea de “reformas estructurales”,
lo manosean a tal grado, como suelen hacerlo con casi todo, que pierde su
verdadero significado. En su discurso olvidan que al hablar de cuestiones estructurales
responder al Cómo es igual de importante que el Qué.
En cuestiones económicas las propuestas de EPN y JVM, son
bastante parecidas. Las de AMLOve, también, aunque esperaba algo diferente, y
es que de verdad, he visto a algunas de las mejores mentes que conozco hacerse
descomunales chaquetas mentales diciendo que AMLOve es de izquierda. Cuando en
realidad, eso es más falso que Los Reyes Magos y el Niño Dios juntos.
El ejemplo más claro, fue la reacción, casi igual, de los
tres candidatos ante la expropiación, por parte del gobierno Argentino a Repsol
YPF. En pocas palabras los tres dijeron que era un error, y que eso afectaría
más la economía Argentina (¿Más?).
Las propuestas de los candidatos siguen las recomendaciones
de Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, se enfocan en el pago de
la deuda externa, el control de la inflación y en fomentar la inversión de
capitales extranjeros en el país. Políticas que, entre otras cosas, nos han
llevado a la situación que hoy vivimos. Nadie propone algo diferente aún cuando
tenemos claros ejemplos de que actuando diferente la situación podría ser otra,
y de nuevo, Argentina es el mejor ejemplo, su gobierno declaro la mayor
moratoria en su historia del pago de la deuda externa, se enfocaron en fomentar
la inversión nacional y en invertir en educación, ciencia y tecnología.
Los resultados son claros, después de dos crisis en México y
Argentina, ellos crecen en promedio 8.5% anual, mientras que nosotros, solo en
un 3.5% al año.
Peor aún, la política que tomara quien sea que llegue al
poder, será la de fomentar la inversión de capital privado, otra prueba de que
vivimos en un mundo de caramelo, el capital extranjero está en crisis y esa
crisis seguirá creciendo y cambiando.
USA, el país al que más exportamos aún no sale de su crisis,
y la Eurozona seguirá con problemas financieros, incluso si a estas alturas
deciden sacar a Grecia del Euro, lo cual ya es tarde. Viene una crisis de la
que USA y el FMI no nos van a sacar (como suelen hacerlo) pues tendrán
problemas domésticos más importantes.
Por ahora sigamos viendo el despilfarro de recursos en las
campañas. Sobre eso, uno de los que se inclinan ¿o empinan?, a un partido político, me dijo, muy
serio, que pensara en la demanda que generan las campañas, que ayuda al empleo,
desde la impresión de carteles, volantes y lo necesario para hacer los spots.
Ni risa me dio, ningún indicador económico muestra eso, el dinero de las
campañas es simplemente dinero desperdiciado.
Como país no estamos usando bien nuestros monetarios, ni
intelectuales. Próximamente José Luis Clava publicará una serie de libros sobre
política económica en casi todos los aspectos que afectan a México, si algún
gobernante llevara a cabo alguna de esas propuestas, los beneficios sociales no
se harían esperar, porque el potencial lo tenemos, pero lo desperdiciamos una
forma trágica.
Desde este pequeño artículo, manifiesto mi más sentido
pésame a los familiares de los 5 estudiantes de la Facultad de Economía de la
UNAM y del Dr. Paulo Scheinvar, fallecidos en días pasados en un terrible accidente
carretero. Perder la vida de personas jóvenes es triste, pero perder la vida de
futuros científicos sociales, más en una realidad como la nuestra, es toda una
tragedia.
Comments
Post a Comment